lunes, 29 de abril de 2013

419.- Top of the Lake



Acabé de ver esta serie el mes pasado y en un principio no pensaba hablar de ella porque no consiguió cubrir mis expectativas. Pero viendo que la revista Fotogramas le dedica la sección “Tengo el mando” no me he podido resistir a escribir lo que pienso.
Estoy muy de acuerdo con Joan Pons, el que escribe el artículo en la revista. Comparar esta serie a “Twin Peaks” es simplemente absurdo, aunque desde hace años en cualquier serie dónde desaparece un niño/a,  o estamos en una sociedad idílica y cerrada dónde hay un misterio aparece la comparación.

“Top of the Lake” es una buena serie, con interpretaciones que te llegan, sobre todo el salvaje Peter Mullan o la atormentada Elisabeth Moss, pero en mi opinión la serie es sobre todo un ejemplo de cómo desaprovechar grandes ideas y subtramas.

¿De qué va?
Una niña embarazada, hija de un salvaje-delincuente-mafioso desaparece. El simple hecho de estar embarazada ya constituye un delito y su desaparición un misterio que nadie está muy interesado en resolver.
Por tanto una agente de policía con un oscurísimo pasado debido a que fue violada siendo adolescente  siente la obligación de investigar, ya que se siente muy identificada.
El jefe de policía y sus propios compañeros la ningunean y se vuelve a enamorar de su antiguo novio que es hijo del delincuente (y medio hermano de la desaparecida).
Además, en un bellísimo paraje al lado del lago, se asienta una extraña comuna de mujeres dirigida por una enigmática líder que interpreta Holly Hunter.

La serie
Está dirigida por Jane Campion, la directora de “El piano” y ambientada en Australia con lo cual aparecen algunos aborígenes y costumbres que nos pueden parecer extrañas o al menos diferentes.

El malo
Peter Mullan interpreta el único personaje verdaderamente bien llevado en la serie. Un salvaje que sólo respeta la memoria de su madre, trafica, roba, tiene a la policía comiendo de su mano, tiene una banda, es padre de asesinos, padre de la niña desaparecida, padre del novio de la protagonista. Es el gran padre y eso va a tener una gran importancia en la serie.
La Buena
Elisabeth Moss interpreta a la heroína, una mujer dañada, maltratada. De los poquísimos personajes limpios y lo suficientemente inteligente como para resolver el caso. Aunque sus deseos, la enfermedad de su madre y sus propias rarezas hacen que no sientas una gran empatía con ella (bueno, soy un tio, esto es muy personal, a lo mejor las chicas o mujeres que la vean piensan de manera totalmente opuesta. Muy respetable)

Desaprovechando la serie.
En mi opinión, el gran problema de esta serie es como se equivoca  y desaprovecha alguno de sus enigmas.
Se centra absolutamente en el amor de los protagonistas, en sus traumas y en la manera de superar una vida de dolor.
Pero es que al centrarse en esto y acabar en 7 episodios, da la sensación de que no han querido o no han sabido, o no les han dejado  indagar en algunos temas. Por ejemplo.
La comuna de mujeres y su líder espiritual, Holly Hunter.  Aparece desaliñada, delgada, una loca liderando a un grupo de mujeres llenas de traumas. Pero ya está, no vemos que pasa  con ellas, su método, la posibilidad de que oculten algo o puedan cambiar algo. Y Holly Hunter apenas dice una docena de frases en toda la serie.
La posibilidad de venganza por parte de la protagonista, conoce a sus violadores, se entera de todo y…

Un montón de hombres armados y con la motivación de una gran recompensa,(por no hablar de los policías) hacen el ridículo ante unos pocos adolescentes.

Y el gran misterio de la casa y de los niños es como un parche en los últimos cinco minutos de una serie que dura 7 horas.

A lo mejor el que se equivoca soy yo y es que le cortaron el dinero obligando a un final atropellado, pero teniendo tantos premios y buenas críticas se me hace extraño.

1 comentario:

  1. Esta, como otras que salieron, no hace ni más ni menos que intentar copiar el estilo de Forbrydelsen que creo escuela. Nada como el original.

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